Alumnado aragonés continúa sin transporte escolar ni auxiliares de educación más de un mes después del comienzo del curso
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Transcurrrido más de un mes desde el comienzo del curso escolar 2023 / 2024, muchos alumnos y alumnas aragoneses continúan sin poder asistir a clase con normalidad. Como, lamentablemente, viene siendo habitual en Aragón durante los últimos años, numerosos colegios de la comunidad autónoma han comenzado este nuevo periodo académico sin contar con el personal de apoyo suficiente para atender a su alumnado con necesidades especiales.
Sirva como ejemplo el caso de un estudiante de 7 años en situación de dependencia y con grandes necesidades de apoyo matriculado en el colegio Alborada de Zaragoza. Hugo tiene una enfermedad rara que le produce debilidad muscular y apenas tiene movilidad. Necesita silla de ruedas, un respirador, un aspirador de secreciones y una persona que esté pendiente de limpiárselas para evitar que se ahogue, además de vigilar su saturación. Son cuidados muy específicos que solo pueden ser prestados por un profesional de enfermería.
El problema es que, a estas alturas de curso, Hugo continúa sin contar con una enfermera en clase, lo que obliga a su madre, Patricia Benito, a hacerse cargo de su cuidado en el aula. «Estoy cumpliendo la función que le correspondería a una profesional y ocupando lo que debería ser un puesto de trabajo. Además, me cuesta seguir el ritmo de las clases y seguir pendiente de mi hijo el resto del día. Estoy agotada. Pero mi caso es solo uno más de muchos. Hay decenas de familias aragonesas en mi misma situación, algo que se repite año tras año, cada comienzo de curso».
No fue hasta este martes, 10 de octubre, cuando Patricia se enteró, por cauces no oficiales, de que muy pronto se solucionaría el problema y podrán contar con la enfermera que Hugo necesita en el colegio. «Aunque, de momento, no nos han concretado la fecha de incorporación», puntualiza esta madre.
Sin bus escolar
La falta de auxiliares de educación y de personal sociosanitario no es la única carencia en este comienzo de curso en los colegios aragoneses. El transporte escolar, o más bien la ausencia del mismo, está constituyendo un auténtico quebradero de cabeza para no pocas familias, especialmente en el medio rural. Es lo que está ocurriendo en el Colegio de Educación Especial Gloria Fuertes de Andorra (Teruel), cuya AMPA forma parte del movimiento asociativo de Plena inclusión Aragón.
Según informa el medio digital La Comarca, tres alumnos de entre 7 y 17 años carecen de servicio de transporte desde el comenzo de este periodo lectivo. Dos de ellos, uno residente en Calaceite, y otro en Beceite, todavía no han podido asistir a sus clases desde que empezaron, el pasado 7 de septiembre, ya que sus familias no pueden hacerse cargo del traslado, y ambos estudiantes permanecen en sus respectivos hogares sin recibir la educación a la que tienen derecho.
Otro compañero del mismo colegio andorrano, que vive en Valdeltormo y también carece de bus escolar, sí que está pudiendo colegio, pero gracias a que sus padres sí que pueden recorrer cada día los 60 kilómetros que separan su casa del centro escolar para llevar a su hijo a clase y volver para recogerlo. Y, por si esto fuera poco, desde el colegio Gloria Fuertes denuncian también que han empezado el curso con tres auxiliares de educación menos de los que le corresponden al centro.
Plena inclusión Aragón quiere expresar todo su apoyo a las familias afectadas por la falta de auxiliares y de servicio de transporte escolar y se suma a su denuncia. Una situación que, tristemente, se repite año tras año en el comienzo del curso escolar en Aragón y que resulta a todas luces incomprensible, ya que el Departamento de Educación conoce desde el curso anterior las necesidades de apoyos que el alumnado va a requerir a partir de septiembre. Unas carencias que atentan directamente contra el derecho a la educación de los niños y niñas afectados por esta mala planificación.